miércoles, 5 de noviembre de 2008

sobre la tolerancia


La utopía de la tolerancia.

La injuria es un delito que dentro de nuestra sociedad tiene un castigo de uno a tres años de cárcel y/o pagar de 10 a 1000 salarios mínimos. Básicamente consiste en deshonrar al otro con apreciaciones que carecen de valides comprobable.

La calumnia por otro lado concite en la acusación de la acción de un delito a un tercero, mismo que no es comprobable o que se convierte en una acusación que resulta falsa. El código penal colombiano castiga el delito con una pena de 3 a 4 años de cárcel y/o pagar de 10 a 1000 salarios mínimos.

La acusación de cualquiera de estos delitos resulta grave y con consecuencias de grave envergadura, pero mas allá de los castigos físicos y de las protecciones que ofrecen nuestras instituciones, hablar de injuria o de calumnia es referirse al hecho de la existencia de las normas morales de la sociedad, de la necesidad de una persona de conservar un buen nombre y unas condiciones de vida aceptables.

Cuando se acusa a una persona de acciones de las cuales no es responsable, se atenta con su derecho al buen nombre, pero sobre todo con su posibilidad de vivir una vida tranquila sin juzgamientos. Y aunque todos tiene derecho a manifestar sus pensamientos y concepciones, se entra a un nivel distinto cuando estas concepciones afectan de manera directa el libre desarrollo de la vida de una persona.

De ahí que se hace trascendental el principio de la tolerancia como un modo nuevo de comprender y ponerse en los zapatos del otro, antes de juzgarlo. Como un modo nuevo de comprender y entender la libertad de todos utilizada en la búsqueda de un consenso.

Pero este principio depende también de la posibilidad de regulación dentro del estado, puesto que en el denunciar y evidenciar los delitos del que representa peligrosidad, se hace justicia y se logra regulación en la sociedad.

El principio de tolerancia se basa en la importancia y el respeto por el otro, así también se parte del caso de la libertad de expresión, en donde se garantiza el derecho de la sociedad a estar informado y al conocimiento de lo que sucede en su entorno.

Con sus ciertas restricciones (también por la seguridad y el bien común) la libertad de expresión, como el completo derecho a un buen nombre; se encuentra aun amenazados, puesto que en la sociedad en la que vivimos los principios de tolerancia y consenso aun siguen siendo una utopía que se ve reflejada en la falta de escucha y de comprensión de los muchos que aun ven en la tolerancia en eso que se escucha a oídos sordos y no se comparte.

miércoles, 22 de octubre de 2008

sobre Mas Fruta

“Vamos a formar cadena hasta llegar a ser mejores y que sepan que somos Mas Fruta”

Francisco Javier Arizaga Bastidas


Algún buen día el hoy exitoso empresario Francisco Arizaga trabajó como obrero y abrió huecos para postes de la empresa de teléfonos, fue mensajero en Okipizza, fue vendedor y comerciante a pequeña escala, trabajo independientemente del día o la noche; un día Pacho como lo conocen sus amigos, tuvo graves necesidades económicas, estuvo desempleado y derrotado, Pero un día, más por una necesidad, abrió un pequeño local de apenas 4 mesas sin imaginar que ese sería el nacimiento de una de las empresas más exitosas en todo el departamento de Nariño, que era el comienzo de algo no grande, sino mas bien descomunal. Un día Francisco Arizaga y su hermano José fundaron la hoy poderosa Mas Fruta.

Francisco Arizaga es oriundo del hermoso municipio de Guitarrilla. Nacido en la calle de La Quina, recuerda como su infancia estuvo rodeada de la hermosura y amplitud de los potreros, de los traviesos juegos de infancia y de las enseñanzas que adquirió de niño.

Hoy agrádese y reconoce una ventaja en haber nacido en donde nació, y recuerda con nostalgia y alegría algunas anécdotas en particular: “me llevaba toda la tarde jugando trompos. Entonces cuando uno comienza a jugar trompos no se preocupa, queda mucho tiempo para jugar, pero cuando uno va llegando otra vez a la rondita ya comienzan los nervios, la estrategia, la picardía y el asare al otro… ve como estas de chistoso, ve como te has peinado ¿Por qué? Por bajarle el ego, para que se le valla mal el trompo. Cuando a uno le parten el trompo, el único trompo que tenía se va a llorar, mas tarde uno entiende que esas experiencias son válidas y le sirven para formarse ¿Por qué? Porque uno aprende la estrategia, aprende a negociar, aprende, a perder o a ganar. Lo mismo pasa con el juego de las canicas, o cuando íbamos a coger renacuajos, nos caíamos y nos preocupábamos por el cómo llegar a casa. De niños hacíamos pactos para guardar secretos cuando nos encontrábamos los niditos de los pajaritos y les poníamos propiedad. Cuando uno llegaba a avisar o a robarse el nido, entonces se armaban las peleas y terminaban en riñas hasta las familias. Considero además que tener una niñez tan bonita, con tantos recuerdos agradables, tan tranquila es una ventaja competitiva dentro de la vida”.

Agrega Pacho que su hijo y las nuevas generaciones están en desventaja, puesto que no han tenido la posibilidad de disfrutar cosas como él lo hizo.

Recuerda también que a sus 7 años su madre le puso a vender talcos, cosméticos y cremas para el carnaval. Pacho solo pensaba en jugar pero al crecer se dio cuenta que esta era una gran oportunidad. Más adelante su familia tuvo un granero y era él quien se encargaba de hacer las compras a Pasto o al Ecuador cuando el negocio se ponía malo. Después Francisco iba a vender medias pantalón en su bicicleta por todo el pueblo.

Más adelante Fráncisco emigro de su pueblo natal a San Juan de Pasto con toda su familia, lo que se convirtió en un cambio trascendental en el transcurso de su vida: “yo viví hasta los 18 años allá, mi mamá tuvo la idea de vender todo lo que tenía hasta las matas, hasta el perro, hasta el gato; mi mamá se vino a Pasto de la nada mientras yo era un trabajador más que vivía de un sueldito”.

Después, Pacho tuvo la posibilidad de trabajar en la empresa de teléfonos de la ciudad de Pasto. Durante su estancia cómo contratista de esta empresa, Pacho esperaba ilusionado ser ascendido de cargo, puesto que la empresa se maneja por cuestión política, y él Había sacrificado buena parte de su tiempo en el proselitismo y en la campaña esperando una buena gratificación. Cuando la empresa le paso una carta él no solo esperaba seguir dentro de la empresa, sino ser ascendido, pues había hecho casi una carrera en 4 años, muchos ya lo conocían y se llevaban con lo que él llama “la rosca”; además, un día antes habían despedido a un compañero que era reparador de teléfonos públicos y Pacho era supuestamente el mas opcionado para ocupar el cargo. Lo que nuestro personaje no sabía es que esa carta que ese día le entregaban era su despido. Hoy en día don francisco Arizaga nos da una gran lección de vida, cuando reconoce que agrádese que lo hayan despedido, pues fue solo aquí cuando comenzó su lucha hacía el éxito.

Al quedarse desempleado un amigo le ayudó para conseguir un trabajo como administrador de una ferretería ubicada en el barrio la Aurora. Su horario de trabajo era de 9 a.m. a 10 p.m., de domingo a domingo; como si fuera poco trabajaba por un salario que no era el mejor. Para ese entonces Pacho tenía 23 años y era el año de 1998. Este fue el año en el que decidió inscribirse a la Universidad de Nariño para la carrera de Comercio Internacional y Mercadeo en jornada nocturna, ya que no podía dejar el trabajo y tenía un hijo que proteger y mantener.

Pacho paso entre los primeros aspirantes, pero lastimosamente encontraría un no como respuesta al pedir permiso en su trabajo. Entonces, así entro a la Universidad, desempleado, pero con la seguridad de que esa oportunidad no podía ser desaprovechada.

Gracias a las amistades que Francisco consiguió en sus 4 años de labores en la empresa de teléfonos de la ciudad de Pasto, el tenía la posibilidad de trabajar los fines de semana como turnero haciendo arreglos, abriendo huecos para postes y demás. Gracias a este oficio él y su hermano sobrevivieron unos buenos meses.

Pero pacho tenía una gran capacidad de vendedor y en su moto iba a negociar pescado a los restaurantes, gracias a su ahínco uno de los compañeros de la Universidad le dio una posibilidad de trabajo en el negocio de su hermano como vendedor.

Así fue como Pacho entro a trabajar a lácteos la Cabaña, su jefe se llamaba Javier Ortiz, quien hoy es contador de Mas fruta.

La Cabaña se especializaba en la venta de queso mozarela, era además el proyecto de tres hermanos que producían leche en Guachucal; parte de la leche la vendían y la otra parte la procesaban; cuando había sobreproducción, la empresa compradora no adquiría tanta leche, entonces el encargado de sacar los productos derivados, era Pacho. El iba a tocar puertas a todas partes: panaderías, pizzerías y demás. El queso mozarela tenía muchas ventajas puesto que era un producto de fácil manejo y duraba más.


Mientras Francisco trabajaba en La Cabaña se le ocurrió la idea de montar una distribuidora de carnes frías, pues en la ciudad había monopolio del producto y era muy apetecido, es así como nace “Compañía de Distribuciones Caira”. La idea fue excelente, pues el producto se distribuía fácilmente y tenía buena acogida, sin embargo quebró. Todo gracias a que gran parte del año el aeropuerto Antonio Nariño se encuentra serrado, tanto así que las estadísticas hablan que solo está habilitado 70 días al año, entonces era muy complejo traer el jamón, cumplir el pedido y costear las pérdidas del producto que no se podía entregar.

Pacho decidió acabar con el negocio y seguir como vendedor en Lácteos La Cabaña, donde todo iba viento en popa. Pero todo se complica cuando el gobierno ayudo a algunos indígenas a montar una planta de procesamiento de leche, llamada el “Sol de los Pastos”. Estaba ubicada en Guachucal, y tenían la posibilidad de ofrecer grandes promociones y muy bajos precios. La Cabaña no podía competir con tales promociones y fue así como a Francisco Arizaga se le ocurrió la idea de montar una pizzería para deshacerse de la gran cantidad de queso mozarela que tenía en su poder.

José Arizaga, su hermano, fue encomendado de buscar un local en el sector de Santa Mónica, donde según Francisco la idea de una pizzeria tendría éxito. Por experiencia Francisco sabía que era este barrio el lugar donde más demanda tenia cualquier producto. José Arizaga logro conseguir un local ubicado frente a la iglesia de Santa Mónica. No había marcha atrás, pero cuando estaban adecuando el local, en frente pusieron una pizzería, que además ofrecía empanadas de queso. Entonces hay estaban de nuevo Francisco y José Arizaga sin una idea clara de negocio y con un cuarto frio lleno de queso mozarela.

Hoy en día parece que era el destino quien se hubiese empeñado en que fuese una frutería lo que este par de hermanos fundaran en ese momento, pues basta con saber lo que vino después. Un día Francisco encontró en la calle a la empleada de una frutería a la cual el también le vendía productos de Lácteos La Cabaña, su nombre era Shirley, quien le aconsejo sobre la idea de montar una frutería antes de otro negocio y a su hermana como una empleada del nuevo local.

Francisco se arriesgo y cuenta que su capital fueron $800.000 que pidió fiados y $200.000 que le prestó su hermano, para contar que Mas fruta comenzó en la necesidad de 2 hermanos y tan solo $1000.000.

Cuando el negocio comenzó hacer exitoso los dueños de la casa sacaron a nuestros personajes y de la manera más ruin, robaron su idea de negocio, está según Don Francisco se convierte en una de las más grandes decepciones dentro de su vida empresarial, pero también en una oportunidad para crecer como empresa e idea.

Frente a su local inicial había un asadero de pollos, que tan solo llevaba 3 meses en el mercado. Gracias a los ahorros que con buena cabeza habían adquirido el par de hermanos y a un préstamo, derivado de la hipoteca de la casa de su madre, por un valor de quince millones de pesos, Francisco contradice a los economistas, asegura que es un hombre de suerte, que la misma existe y adquiere el primer local propio de Mas Fruta.

Siete meses después nace Mas Fruta Parque Bolívar, como muchos aspectos en la empresa, como una casualidad. Un día una prima de Pacho llego buscando su ayuda para la consecución de un empleo. En un momento de stress le contesto que no tenían espacio y lo que necesitaban era un nuevo local en la zona del Parque Bolívar. Pocos días después Pacho recibió una llamada de la misma mujer que ofertaba 3 sitios distintos en donde podría ubicarse Mas Fruta. Uno de esos es el lugar en donde actualmente está ubicada una de las sedes de la empresa.

Mas Fruta del Amorel del centro se convierte en la primera franquicia que Francisco y José Arizaga venden, solo por tratarse de un buen amigo, por pensar en la evolución y el posicionamiento de la empresa, pero con el recelo de cualquier padre dueño de una idea. Tiempo después nacería, Mas Fruta del Sebastián de Belalcazar ubicado en la Plazoleta de comidas del mismo centro comercial.

Mas Fruta la Riviera nace de una casualidad, cuando en compañía de su amigo Javier Ortiz un día domingo paseando en sus bicicletas por la avenida de los estudiantes, este último le hace una propuesta, que consiste en alquilarle un local comercial. En ese momento se dan cuenta que frente a ellos se ha construido un nuevo centro comercial, dentro del cual existe la posibilidad de rentar un local.

Ese mismo día Francisco compra un local, que no cumple del todo sus expectativas, pero le enseña que las decisiones apresuradas no dan resultado y que es mejor dedicarse más tiempo a pensar concienzudamente en las consecuencias de cada decisión.

Pacho reconoce que a excepción de La Riviera la ubicación de las sedes simplemente se ha dado por pura casualidad.

Después de haber buscado locales con insistencia, hoy en día cada mes por lo menos existen dos ofertas de nuevos locales. De todos modos nuestro personaje piensa en la posibilidad de buscar algún cupo en el nuevo Unicentro o Carrefur, próximos a construirse en Pasto. Respecto a esto, hace parte de un reto personal, para Pacho, el hecho de seguir evolucionando como empresa y advierte: “Vamos a formar cadena hasta llegar a ser mejores y que sepan que somos Mas Fruta”

Pacho también sueña con posicionarme como una cadena en Pasto, pero más allá tener Más Fruta en Cali, Bogotá y Pereira que según él: “son unos buenos mercados y en los cuales sería muy bueno poder incursionar”.

Después de ser la productora especial de queso en Más fruta, Lácteos La Cabaña cierra. Tiempo después fue necesario alquilar una planta en Guachucal para solventar la demanda de la empresa. Lastimosamente Mas fruta tiene una demanda de productos inconstante puesto que en un fin de semana se venden el equivalente a los 5 días restantes y es complejo encontrar una productora que venda productos lácteos solo para estos días. Debido a esto la empresa debe pensar en la creación de una planta especializada para ellos.

Fráncico Arizaga sostiene que todos los aspectos en la vida son inconstantes, que todo cambia, evoluciona y en algún momento se convierte en reemplazable, es así como la planta personalizada de Mas Fruta cerró a consecuencia de que hoy la empresa debe empezar a ver a futuro, piensa certificarse y debe poner la cuestión de los lácteos en manos expertas.

Poco tiempo después su hermano José toma otro rumbo; lo que obliga a Francisco a seguir en su marcha solo, pero evolucionando en la medida del aprendizaje.

Muy al comienzo de la empresa nuestro personaje se veía obligado a madrugar al mercado a las 3 de la mañana con el objetivo de buscar fruta. Pero la empresa tenía constantes contratiempos con este tipo de productos y fue necesario ir abriendo camino y buscar los productores que garantizaran calidad y constancia.

El nombre de Mas Fruta es el resultado de una tarde frente al televisor, mirando Mas música, así como también la primera imagen y hasta el logotipo de mas fruta son el resultado de la creatividad de nuestro personaje. Hoy en día Mas Fruta piensa en remodelar, en cambiar de oficinas, de imagen y seguir evolucionando.

La empresa aprendió a ser original, después de que un día copiaron hasta la marca de los recipientes en donde batían la leche. Francisco innovo su negocio con base en lo que la academia le enseño, en su propia creatividad y en los eventos a los que ha asistido; hasta el punto de ser el ejemplo a seguir de muchas fruterías y negocios. Evolucionar e innovar hace parte del proceso de acreditación de calidad que no hace mucho ha comenzado Mas Fruta.

Una de las grandes frustraciones, según pacho, es el estado, el gobierno y sus impuestos, lo costoso que resulta hacer empresa en un departamento que carece de vías de acceso pertinentes que permitan la transportabilidad de los productos; que los hagan más económicos y asequibles. Aún así reconoce al nariñense como un personaje rico en carácter, fortalecida en los obstáculos y luchadora.

Otra de las grandes decepciones de pacho esta en las veces que su empresa ha sido víctima de robos “nos han robado es un país de frustraciones” precisamente el 24 de diciembre le robaron a Mas Fruta la plática de las quincenas. Lo más frustrante de todo es saber qué un trabajador había colaborado en el robo, pues según Pacho estar dentro de la empresa era la única forma de saber que solo 10 minutos antes llegaban los mensajeros siempre a dejar el dinero. La empresa también fue víctima de un robo en la sede de Santa Mónica con las llaves del local. Es por ello que a veces nuestro personaje se siente tan vulnerable.

Mas fruta cuenta hoy con 50 trabajadores directos e indirectos, es por ello que se hace necesario que se maneje de la siguiente manera: la administración se encuentra en una casa ubicada en el barrio Chile, que bien se pueden llamar las oficinas directivas de Mas Fruta. Desde este lugar se administran todos los locales, en el mismo se encuentran ubicadas las bodegas donde se recepcióna y distribuye toda la materia prima, todos los días, hasta el medio día.

Para el futuro de Mas Fruta, espera que alguno de sus 2 hijos siga a la cabeza de la empresa, pues para Pacho Mas fruta también hace parte del éxito de las personas de la región de Guitarrilla que se han abierto camino poco a poco en la ciudad de Pasto. Sus hijos tienen solo 12 y 1 año, pero Pacho siente orgullo al saber que se parecen a él y que la mayoría del tiempo es su madre y su buena educación las que han acompañado a sus hijos, agrádese a esta mujer el hecho de que los presione a la disciplina, inclusive en los oficios del hogar, considera además que sus hijos no tendrán muestra de machismo al ser criados, formados y disciplinados por una mujer.

Según Francisco Arizaga aun más gratificante que el dinero o la misma expansión de su empresa, es el hecho de ser llevado a las universidades a contar su historia de vida y éxito, a los cursos del Sena en Guaitarilla; como un ejemplo a seguir, como alguien que abrió camino. Según él la historia se repite, pues fue él quien un día llevo la historia de unos personajes exitosos de su región, a la academia, como ejemplo de la victoria existente en la región nariñense y particularmente de Guitarrilla.

Piensa también que a medida que corren los años la energía se empieza a perder, a pesar de considerarse un hombre joven recuerda que: “yo antes vivía en el local del Parque Bolívar me acomodé en el tercer piso y de ahí tenía camarotes cuando miraba que la caja se llenaba yo bajaba”.

De nuestro personaje se puede decir también que es un amante y amigo de la tecnología, prueba de ello es la instauración de un excelente software contable, que pronto será remplazado por otro aun mejor, todo esto con el objetivo de que la empresa se siga proyectando en el excelente servicio al cliente, de una manera más asequible, así como también con el objeto de permitir una vigilancia constante de los trabajadores, porque nuestro personaje es de los que cree que cuando: “el gato se van los ratones hacen fiesta”.

Pacho considera también que gran parte de su éxito está en haber logrado buenas amistades, ser humilde y a pesar del éxito no haber cambiado para mal.

Mas fruta es también exponente del arte Nariñense, pues en sus locales exhibe cuadros de pintores de la región, con ánimos de vender pero también de decorar y resaltar el talento de los autores.

Si francisco volviera a nacer, le gustaría hacer una cosa totalmente diferente a trabajar con alimentos, algo como los plásticos, papel; y piensa también que podría ser un buen profesor; todo esto basado en la idea de encontrar un negocio que beneficie a otras personas, pues según nuestro personaje, Mas Fruta ayuda a mucha gente.

Mas Fruta es la historia de una empresa y de un hombre soñador, que cambia y evoluciona; que sueña y lucha con un futuro mejor no solo para su empresa, sino también para toda la región.

Por: Claudita Coral

jueves, 18 de septiembre de 2008

para las parejas Gay


OTRA FALLO A FAVOR DE LAS PAREJAS GAY

El pasado 20 de Agosto la sala plena de la corte constitucional decidió que los compañeros permanentes del mismo sexo se deben obligaciones respecto a alimentos se trata, tal como sucede con las parejas de distinto sexo. Es así como el incumplimiento de esta norma se puede judicializar como inasistencia alimentaria, cuando se incumplan las obligaciones de socorro mutuo que tienen dichas parejas, sin justa causa.
Esta nueva norma fue aprobada a consecuencia de la contrariedad que causaba hacia la carta magna el hecho de no poder demandar al compañero sentimental permanente del mismo sexo. Además al igual que con las parejas heterosexuales, se aplicaran las sanciones que rezan en el código penal: de 16 a 54 meses de privación de la libertad. Esta norma se aplica también para el incumplimiento de sus padres, hermanos, hijos adoptivos o naturales.
La norma demandada se encuentra en el parágrafo del artículo 1º de la ley 1181 de 2007, por medio de la cual la protección y asistencia alimentaria se extiende a las uniones maritales de hecho, mejor conocidas como unión libre; sin embrago, se desprende del tenor de la norma, que el legislador actuó de forma discriminativa al definir la pareja como la unión conformada por un hombre y una mujer, dejando de lado las parejas conformadas por individuos del mismo sexo, menoscabado a juicio de la demandante, la dignidad humana, el libre desarrollo de la personalidad expresado en la orientación sexual y por último el derecho a la igualdad.

martes, 26 de agosto de 2008

algo sobre educacion superior



¿LA EDUCACION SUPERIOR ES UNA UTOPÍA?
Por: Claudia Coral
En Colombia hay más de 44.524.685 millones de personas, hay que precisar que esta cifra en 3 o 4 horas carecerá de valides y abra aumentado por lo menos con unas 5 vidas mas. Si bien es claro todo lo anterior es necesario tener en cuenta que una de las poblaciones más grandes dentro el país está en los jóvenes entre los 16 y 21 años, que por lo general abandonan con un titulo el bachillerato para aumentar las cifras de los estudiantes de la educación superior.
Tristemente más de la mitad se quedaran por fuera, no ingresara a la educación superior y aumentaran las frías cifras de desempleo, delincuencia o en el mejor de los casos de la clase obrera.
En Colombia hay muchas más universidades de tipo privado que público, tanto así que por cada publica siquiera hay 3 privadas en una ciudad. Aun, si se llegara a ingresar a una universidad Publica después de pasar los requisitos, el ICFES de Albert Einstein, el examen de admisión, las pruebas psicotecnicas, etc. hay que tener en cuenta que la manutención de una carrera en pregrado no resulta económica y en las grandes ciudades, si solo se hace la cuenta del transporte de la carrera resultara que es una millonada.
Como si fuera poco ya es un hecho que a muchos estudiantes de la universidad pública se le cobra más de un salario mínimo mensual, cuando muchas de las familias de estudiantes subsisten solo con uno.
Si usted no viviera en este país y leyera este articulo ¿qué pensaría?, acaso que es demasiado complicado aspirar a ser profesional dentro del país o que simplemente es una broma exagerada de mal gusto.
Personalmente optaría por la primera, pero tristemente todo lo anterior es una realidad, en Colombia es difícil acceder a un tipo de educación pública superior y cuando se hace necesario recordarles a estas instituciones que un salario mínimo para una persona de estrato 1 y 2 es demasiado, estas apelan a su autonomía, como si ya no fuera suficiente que el resto del sistema colombiano en la practica siempre este en contra de los menos favorecidos.
No nos quejemos entonces cuando encontremos que los índices de delincuencia cresen, que la situación de convivencia en el país va de mal en peor y que de unos años para acá las calles se hagan prácticamente intransitables, pues el estado y esta sociedad han cerrado demasiadas puertas.